CLORURO DE MAGNESIO,
UN REMEDIO INCREIBLE PARA UN MAL INCURABLE
http://youtu.be/M1ki1YU-uRw
(Maya es un testimonio viviente, despues de haber estado sin poder caminar casi un mes)
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CLORURO DE MAGNESIO. REMEDIO PARA UN MAL INCURABLE
Los problemas de la columna vertebral, nervio ciático, descalcificación, etc., tienen ahora la cura perfecta, sin dolor, fácil y barata, y al mismo tiempo resuelve las enfermedades por carencia de magnesio en la alimentación, inclusive la artritis.
TESTIMONIO DEL PADRE J. CHORR
El padre J. Chorr, en estado casi paralítico (10 años antes de comenzar el tratamiento), contaba con 61 años de edad. Sentía punzadas agudas en la región lumbar (en la columna vertebral). Los médicos afirmaban que su mal era incurable; al levantarse de la cama, cada mañana, sentía un fuerte dolor en la columna. Los médicos decían que era causado por el nervio ciático que presionaba la tercera vértebra. Este dolor se hacía sentir también cuando estaba parado, razón por la cual tuvo que trabajar la mayor parte del tiempo sentado.
Hubo un año en que todo lo hacía sentado, menos la misa. Todo era un tormento, y tenía que suspender sus viajes a causa del dolor. Después de algún tiempo, casi medio año después, esperaba encontrar mejoría. Durante un verano muy seco, empeoró más. Comenzó entonces, inclusive, a celebrar la misa sentado. Entonces volvió a la ciudad de Florianápolis, en Brasil, buscando un especialista que lo atendiera, tomando nuevas radiografías. Ahora ya no era una sola vértebra, sino que eran varias las vértebras descalcificadas.
Sobre todo en mujeres adultas son frecuentes los
dolores a las espaldas-
Esta enfermedad parecía imposible de afrontar con éxito. Las diez aplicaciones de ondas cortas en la columna no detuvieron el dolor. El dolor era tan intenso que ni siquiera podía dormir acostado; debía permanecer sentado en la cama hasta casi caer de sueño. Así descubrió que podía dormir enrollado en la cama en posición fetal. Solo esto daba resultado. Entonces, desengañado por los doctores, apeló a Dios: −“Estás viendo a tu criatura, y no te cuesta nada darme una solución”−, decía.
Casualmente fue a un encentro jesuítico en Porto Alegre, y el padre Juárez le contó que era fácil la cura de su problema: con Cloruro de Magnesio. Le mostró un libro del padre Puig, jesuita español, que lo había descubierto curando a su madre, que en esa época se encontraba en estado avanzado de descalcificación. Y en broma le dijo: −“Tomándote esta sal (Cloruro de Magnesio) solo vas a morir si te das un tiro en la cabeza, o por algún accidente”−. Comenzó a tomar una copita por la mañana y otra por la noche. Continuó durmiendo enrollado, y como a los 20 días despertó estirado en la cama sin sentir ningún dolor, pero si sentía dolor a caminar.
Pasaron 40 días, cuando finalmente se levantó todo extrañado: −“Será que estoy soñando”−. Ya no sentía nada de dolor y hasta consiguió dar un paseo por la ciudad, recordando los 10 años pasados cargando con aquel tremendo dolor. Después de otros 10 días, caminó el día entero sintiendo un pequeño malestar. A los 60 días de estar tomando la misma dosis, la pierna dolorida estaba igual, o mejor, que la otra. A los 3 meses sintió mayor flexibilidad, y a los 10 meses consiguió doblarse como un deportista.
COMO FUNCIONA EL MAGNESIO
El magnesio arranca el calcio calcificado en los lugares indebidos y lo coloca sólidamente en los huesos y más aún, consigue normalizar la corriente sanguínea, estabilizando la presión. El sistema nervioso queda totalmente calmo, sintiendo mayor lucidez. Las frecuentes punzadas en el hígado desaparecieron. La próstata que habían dicho los médicos debería ser operada en la primera oportunidad, ya no le incomodaba. Pero el efecto más importante es el estado de ánimo, al punto que muchas personas le preguntaban: −“¿Qué está pasando contigo, estás más joven?”−, y él le contestaba: −“Es verdad. Me retornó la alegría de vivir”−. Por esta razón el padre J. Chorr se siente obligado a repartir esta solución que le llegó como un regalo de Dios. Centenares de personas se han curado de estos males: columna, artritis, nervios, etc.
COMO PREPARAR LA BEBIDA
1.-Disolver en una jarra de vidrio 30 gramos de cloruro de magnesio, en un litro de agua hervida, a temperatura ambiente.
2.-Mezclar bien con una cuchara de madera. No utilizar elementos plásticos ni metálicos. Es importante que el cloruro de magnesio lo adquiera en grado farmacéutico, con alguna marca que certifique su calidad, y nunca en una funda sin etiqueta, por el riesgo de estar adquiriendo un producto adulterado.
DOSIS RECOMENDADA
Una copita de licor, teniendo en cuenta la edad y los padecimientos:
1.-De los 40 a los 55 años, media dosis.
2.-De los 56 a los 70 años, una dosis por la mañana.
3.-De los 71 años en adelante, una dosis por la mañana y otra por la noche.
Después de los 40, una copita diaria resulta tan
beneficioso como preventivo para la salud integral.
IMPORTANTE
Para las personas que viven en la ciudad, con alimentación de baja calidad, con productos enlatados y abundantes en químicos, deben consumir un poco más (dosis doble). Para las personas del campo la dosis es menor.
IMPORTANCIA DEL CLORURO DE MAGNESIO
-El magnesio produce equilibrio mineral, reanima las funciones vitales de los órganos (glándulas), activa los riñones para eliminar el ácido úrico. En los casos de artritis, descalcifica la membrana de las articulaciones. Ataca la esclerosis calcificada, evitando infartos. Actuando como purificador de la sangre, vitaliza el cerebro. Devuelve y conserva la juventud hasta avanzada edad.
-El magnesio es, de todos los minerales, el más indispensable, especialmente después de los 40 años, cuando el organismo comienza a absorber cada vez menos magnesio de la alimentación, provocando vejez y enfermedades. Por eso debe ser tomado de acuerdo a la edad.
-El magnesio no crea hábito, pero al dejar de consumirlo pierde uno su protección. Una persona no conseguirá escapar de todos los males simplemente por tomar magnesio, pero al consumirlo hará que todo sea más saludable.
-El magnesio no es un remedio, es un alimento sin ninguna contraindicación, compatible con cualquier medicamento simultáneamente. Tomarlo para una enfermedad determinada equivale a reordenar todo el organismo, consiguiendo de esta forma una cura integral.
PRINCIPALES APLICACIONES
Nutre, disminuye el agotamiento intelectual, elastiza las arterias, cura la artrosis, elimina la atrofia muscular, remedia el desequilibrio mineral, modera los desórdenes digestivos e intestinales, alivia la fatiga, previ
ene problemas de próstata, es laxante y tonificante.
INDICACIONES
1.- Columna, nervio ciático, calcificación, sordera por calcificación. Dosis: tres dosis (mañana, tarde y noche). Una vez obtenida la cura, no abandonar su toma para evitar, en forma preventiva, el retorno de la enfermedad.
2.- Artritis. El ácido úrico se deposita en las articulaciones del cuerpo, especialmente en los dedos que se hinchan. Esto se produce porque los riñones están fallando por falta de magnesio (revisar los riñones, por si acaso existen problemas mayores). Dosis: una dosis por la mañana. Si en 20 días no siente mejoría, entonces tome una dosis por la mañana y otra por la noche. Después de curado, continuar con la dosis preventiva (una dosis por la mañana).
Muchas malformaciones que se producen por el
envejecimiento se pueden revertir con el uso
de cloruro de magnesio.
3.- Próstata. Un anciano ya no podía orinar; en la víspera de la operación le dieron 3 copitas, e inmediatamente comenzó la mejoría. Después de una semana estaba totalmente curado sin necesidad de cirugía. Hay casos en que la próstata vuelve a su total normalidad. Dosis: dos copitas por la mañana, dos por la tarde y dos por la noche. Al conseguir la mejoría, tomar solo la dosis preventiva.
4.- Achaques de vejez. Rigidez, calambres, temblores, arterias duras, pérdida de memoria y falta de actividad mental. Dosis: una dosis por la mañana, una dosis por la tarde y otra por la noche.
5.- Cáncer. Todos tenemos cáncer en grado moderado, que consiste en algunas células malformadas por causa de algunas sustancias o por presencia de partículas tóxicas. Estas células no son compatibles con las células sanas. El magnesio consigue combatir las células cancerosas, vitalizando las células sanas. Es recomendable usar el cloruro de magnesio de manera preventiva o en la etapa inicial del cáncer. Cuando la enfermedad está muy avanzada el magnesio puede frenar un poco el avance, pero ya no curar. El magnesio es un eficaz preventivo contra el cáncer de mamas y de la matriz, así como el de próstata.
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Fuente: Artículo del Padre J. Chorr, Colegio Catarinense, profesor de Física, Química y Biología.
Información científica adicional de: Ing. Urbano Aguilar Miranda, maestría en ciencias químicas, síntesis y productos naturales, nombrado investigador Nacional por el Gobierno e México en 1987, y pionero del conocimiento y divulgación delas bondades del cloruro de magnesio en México.
