.
Amate para que otros te imiten y honren la vida que han recibido de Dios. Deja de cargar los fardos de su victimismo. Eso no es amor, sino la proyección de tu propia desvalorización e ideas de carencia. El amor no se afirma mediante el drama de la autonegación. S
.
.
al de esta trampa mental. No la expandas más. El mejor camino para que alguien deje de sufrir, es mostrándole el camino para rencontrase con su propia valía. Esto no depende de nadie más. Tu ejemplo los inspirara, lo demás es asunto de ellos. Deja de complicarte la existencia y acepta el proceso de cada quien. Sal de tu ego espiritual, y suelta tus pretensiones de ser el salvador de tu familia o el mundo entero.
.
© Ari Shemoth
