Publicado por MAYA el 26 de Febrero de 2019 a las 14:08
Las áreas de materia gris relacionadas con la memoria, la empatía y el estrés se transforman de forma considerable-
.
La meditación puede provocar cambios considerables en las estructuras del cerebro...
.
No lo dice un grupo «new age», ni unos amantes de la pseudociencia o de la falsa espiritualidad, sino un equipo de psiquiatras liderado por el Hospital General de Massachusetts, que ha realizado el primer estudio que documenta cómo ejercitar la meditación puede afectar al cerebro.
.
Según sus conclusiones, publicadas enPsychiatry Research, la práctica de un programa de meditación durante ocho semanas puede provocar considerables cambios en las regiones cerebrales relacionadas con la memoria, la autoconciencia, la empatía y el estrés. Es decir, que algo considerado espiritual, nos transforma físicamente y puede mejorar nuestro bienestar y nuestra salud.
.
«Aunque la práctica de la meditación está asociada a una sensación de tranquilidad y relajación física, los médicos han afirmado durante mucho tiempo que la meditación también proporciona beneficios cognitivos y psicológicos que persisten durante todo el día», explica la psiquiatra Sara Lazar, autora principal del estudio. «La nueva investigación demuestra que los cambios en la estructura del cerebro pueden estar detrás de esos beneficios demostrados, y que la gente no se siente mejor solo porque se han relajado», apunta.
.
Lazar ya había realizado estudios previos en los que había encontrado diferencias estructurales entre los cerebros de los profesionales de la meditación, con experiencia en este tipo de prácticas, y los individuos sin antecedentes, como, por ejemplo, un mayor grosor de la corteza cerebral en áreas asociadas con la atención y la integración emocional. Pero entonces la investigadora no pudo confirmar si este proceso había sido fruto de, simplemente, haber pasado unos ratos de reflexión.
.
Conciencia sin prejuicios
.
Para el estudio actual, los científicos tomaron imágenes por resonancia magnéticade la estructura cerebral de 16 voluntarios dos semanas antes y después de realizar un curso de meditación de ocho semanas, un programa para reducir el estrés coordinado por la Universidad de Massachusetts. Además de las reuniones semanales, que incluían la práctica de la meditación consciente, que se centra en la conciencia sin prejuicios de sensaciones y sentimientos, los voluntarios recibieron unas grabaciones de audio para seguir con sus cavilaciones en casa.
.
Los participantes en el grupo de meditación pasaron 27 minutos cada día practicando estos ejercicios. Sus respuestas a un cuestionario médico señalaban mejoras significativas en comparación con las respuestas antes del curso. El análisis de las imágenes por resonancia magnética encontró un incremento de la densidad de materia gris en el hipocampo, una zona del cerebro importante para el aprendizaje y la memoria, y en estructuras asociadas a la autoconciencia, la compasión y la introspección.
.
Además, se descubrió una disminución de la materia gris en la amígdala cerebral, un conjunto de núcleos de neuronas localizadas en la profundidad de los lóbulos temporales, lo que está relacionado con una disminución el estrés. Ninguno de estos cambios fueron observados en el grupo de control formado por otros voluntarios, lo que demuestra que no fueron resultado solo del paso del tiempo.
.
«Es fascinante ver la plasticidad del cerebro y cómo, mediante la práctica de la meditación, podemos jugar un papel activo en el cambio del cerebro y puede aumentar nuestro bienestar y calidad de vida», dice Britta Hölzel, autora principal del estudio. El hallazgo abre las puertas a nuevas terapias para pacientes que sufren problemas graves de estrés, como los que soportan un agudo estrés post-traumático tras una mala experiencia.
No lo dice un grupo «new age», ni unos amantes de la pseudociencia o de la falsa espiritualidad, sino un equipo de psiquiatras liderado por el Hospital General de Massachusetts, que ha realizado el primer estudio que documenta cómo ejercitar la meditación puede afectar al cerebro. Según sus conclusiones, publicadas en Psychiatry Research, la práctica de un programa de meditación durante ocho semanas puede provocar considerables cambios en las regiones cerebrales relacionadas con la memoria, la autoconciencia, la empatía y el estrés. Es decir, que algo considerado espiritual, nos transforma físicamente y puede mejorar nuestro bienestar y nuestra salud.
.
«Aunque la práctica de la meditación está asociada a una sensación de tranquilidad y relajación física, los médicos han afirmado durante mucho tiempo que la meditación también proporciona beneficios cognitivos y psicológicos que persisten durante todo el día», explica la psiquiatra Sara Lazar, autora principal del estudio. «La nueva investigación demuestra que los cambios en la estructura del cerebro pueden estar detrás de esos beneficios demostrados, y que la gente no se siente mejor solo porque se han relajado», apunta.
.
Lazar ya había realizado estudios previos en los que había encontrado diferencias estructurales entre los cerebros de los profesionales de la meditación, con experiencia en este tipo de prácticas, y los individuos sin antecedentes, como, por ejemplo, un mayor grosor de la corteza cerebral en áreas asociadas con la atención y la integración emocional. Pero entonces la investigadora no pudo confirmar si este proceso había sido fruto de, simplemente, haber pasado unos ratos de reflexión.
.
Conciencia sin prejuicios
.
Para el estudio actual, los científicos tomaron imágenes por resonancia magnética de la estructura cerebral de 16 voluntarios dos semanas antes y después de realizar un curso de meditación de ocho semanas, un programa para reducir el estrés coordinado por la Universidad de Massachusetts. Además de las reuniones semanales, que incluían la práctica de la meditación consciente, que se centra en la conciencia sin prejuicios de sensaciones y sentimientos, los voluntarios recibieron unas grabaciones de audio para seguir con sus cavilaciones en casa.
.
Los participantes en el grupo de meditación pasaron 27 minutos cada día practicando estos ejercicios. Sus respuestas a un cuestionario médico señalaban mejoras significativas en comparación con las respuestas antes del curso. El análisis de las imágenes por resonancia magnética encontró un incremento de la densidad de materia gris en el hipocampo, una zona del cerebro importante para el aprendizaje y la memoria, y en estructuras asociadas a la autoconciencia, la compasión y la introspección.
.
Además, se descubrió una disminución de la materia gris en la amígdala cerebral, un conjunto de núcleos de neuronas localizadas en la profundidad de los lóbulos temporales, lo que está relacionado con una disminución el estrés. Ninguno de estos cambios fueron observados en el grupo de control formado por otros voluntarios, lo que demuestra que no fueron resultado solo del paso del tiempo.
.
«Es fascinante ver la plasticidad del cerebro y cómo, mediante la práctica de la meditación, podemos jugar un papel activo en el cambio del cerebro y puede aumentar nuestro bienestar y calidad de vida», dice Britta Hölzel, autora principal del estudio.
.
El hallazgo abre las puertas a nuevas terapias para pacientes que sufren problemas graves de estrés, como los que soportan un agudo estrés post-traumático tras una mala experiencia.
Publicado por KAREN el 26 de Julio de 2016 a las 19:34
La meditación es una actividad abstracta que cada persona vive de manera particular. Para unos puede tener connotaciones religiosas o espirituales, mientras que para otros es un método intelectual para acallar el bullicio interno y conseguir estados más creativos o emocionalmente positivos. Pero meditar no es otra cosa que un ejercicio intelectual. Si nos atenemos al significado etimológico de la palabra, meditaciónse refiere a una práctica de naturaleza intelectual a través del cual se potencia la atención y la consciencia en el momento presente.
La práctica de lameditacióntiene unosefectos psíquicos y fisiológicosmuy concretos en el organismo:
Potencia la salud mental y física
Aumenta el cociente intelectual
Desarrolla la inteligencia emocional y la empatía
Mejora la memoria
Alivia el estrés, la ansiedad y la depresión
Reduce la presión sanguínea
Aumenta la felicidad
En el año 2011 tuvo lugar un importante hallazgo científico a propósito de la meditación. Un equipo de psiquiatras liderado por el Hospital General de Massachusetts -con Sara Lazar al frente (neurocientífica del Hospital General de Massachussetts)- realizó el primer estudio que documentaba cómo ejercitar la meditación podía afectar al cerebro. Según sus conclusiones, publicadas enPsychiatry Research,la práctica deun programa de meditación de 27 minutos diarios durante un período de ocho semanaspuede provocarconsiderables cambios en las regiones cerebrales relacionadas con la memoria, la autoconciencia, la empatía y el estrés.Es decir, que algo considerado espiritual por muchos,puede transformarnos físicamente y puede mejorar nuestro bienestar y nuestra salud.
LOS INVESTIGADORES ENCONTRARON QUE AL MEDITAR POR 27 MINUTOS…
Hubo un aumento en la densidad de materia gris en el hipocampo, conocido por ser importante para el aprendizaje y la memoria, y en estructuras asociadas a la autoconciencia, la compasión y la introspección (analizarse a uno mismo).
Reducciones informada por los participante en el estrés también se correlacionaron con una menor densidad de materia gris en la amígdala, que se sabe que juega un papel importante en la ansiedad y el estrés.
Además:
Aunque ningún cambio fue visto en una estructura asociada a la auto-conciencia llamada la ínsula, que había sido identificado en estudios anteriores, los autores sugieren que la práctica de la meditación a largo plazo podría ser necesaria para producir cambios en esa área.
Meditar no solo reduce el estrés o relaja, meditar cambia, literalmente, tu cerebro.
Según informa elDiario ABC, para realizar el estudio, los científicos tomaronimágenes por resonancia magnéticade la estructura cerebral de 16 voluntarios dos semanas antes y después de realizarun curso de meditación de ocho semanas, un programa para reducir el estrés coordinado por la Universidad de Massachusetts. Además de las reuniones semanales, que incluían la práctica de la meditación consciente, que se centra en la conciencia sin prejuicios de sensaciones y sentimientos, los voluntarios recibieron unas grabaciones de audio para seguir con sus cavilaciones en casa.
Con la práctica de la meditación 26 minutos al día durante 8 semanas las áreas de materia gris relacionadas con la memoria, la empatía y el estrés se transforman de forma considerable.
El análisis de las imágenes por resonancia magnética encontró un incremento de la densidad de materia gris en el hipocampo, una zona del cerebro importante parael aprendizaje y la memoria, y en estructuras asociadas a laautoconciencia, la compasión y la introspección. Además, se descubrió una disminución de la materia gris en laamígdala cerebral, un conjunto de núcleos de neuronas localizadas en la profundidad de los lóbulos temporales, lo que está relacionado conuna disminución el estrés. Ninguno de estos cambios fueron observados en el grupo de control formado por otros voluntarios, lo que demuestra que no fueron resultado solo del paso del tiempo.
Otro estudio más reciente (febrero de 2015), apunta en la misma dirección. Elestudio realizado por investigadores de la Universidad de Californiaen Los Ángeles (UCLA, Estados Unidos) ha descubierto que la meditación parece ayudar a preservar la materia gris del cerebro, el tejido que contiene las neuronas.
Las áreas del cerebro afectadas por el envejecimiento (en rojo) son menos extensas en las personas que meditan (las de la fila inferior). Imagen: Eileen Luders. Fuente: UCLA.
Los científicos estudiaron específicamente la relación entre la edad y la materia gris. Compararon 50 personas que habían meditado durante años con 50 que no lo habían hecho. Las personas de ambos grupos mostraban pérdida de materia gris a medida que envejecían. Pero entre los que meditaban, el volumen de materia gris no disminuía tanto como entre los que no lo hacían. El artículo aparece en la última edición en línea de la revista Frontiers in Psychology.
Sara Lazar, neurocientífica del Hospital General de Massachussetts y de la Facultad de Medicina de Harvard, ha sido la primera persona en realizar un estudio sobre los beneficios de la práctica de la meditación, e incluso ella se sorprendió de los resultados. Meditar no solo reduce el estrés o relaja, meditar cambia, literalmente, tu cerebro.
Aquíse pueden consultar los resultados del estudio de Sara Lazar con gráficos interesantes. Y por supuesto no te pierdas la interesante charla que realizó acerca de cómo la meditación cambia nuestro cerebro.
Como la Meditación puede cambiar la forma de nuestro Cerebro.
Dra. Sara Lazar. TED
8 SEMANAS DE MEDITACIÓN BASTAN PARA CAMBIAR EL CEREBRO
Las áreas de materia gris relacionadas con la memoria, la empatía y el estrés se transforman de forma considerable
La meditación puede provocar cambios considerables en las estructuras del cerebro. No lo dice un grupo «new age», ni unos amantes de la pseudociencia o de la falsa espiritualidad, sino un equipo de psiquiatras liderado por el Hospital General de Massachusetts, que ha realizado el primer estudio que documenta cómo ejercitar lameditaciónpuede afectar al cerebro.
Según sus conclusiones, publicadas en Psychiatry Research, la práctica de un programa demeditaciónduranteochosemanas puede provocar considerables cambios en las regiones cerebrales relacionadas con la memoria, la autoconciencia, la empatía y el estrés. Es decir, que algo considerado espiritual, nos transforma físicamente y puede mejorar nuestro bienestar y nuestra salud.
"Aunque la práctica de la meditación está asociada a una sensación de tranquilidad y relajación física, los médicos han afirmado durante mucho tiempo que la meditación también proporciona beneficios cognitivos y psicológicos que persisten durante todo el día", explica la psiquiatra Sara Lazar, autora principal del estudio.
"La nueva investigación demuestra que los cambios en la estructura del cerebro pueden estar detrás de esos beneficios demostrados, y que la gente no se siente mejor solo porque se han relajado", apunta.
Lazar ya había realizado estudios previos en los que había encontrado diferencias estructurales entre los cerebros de los profesionales de la meditación, con experiencia en este tipo de prácticas, y los individuos sin antecedentes, como, por ejemplo, un mayor grosor de la corteza cerebral en áreas asociadas con la atención y la integración emocional. Pero entonces la investigadora no pudo confirmar si este proceso había sido fruto de, simplemente, haber pasado unos ratos de reflexión.
Conciencia sin prejuicios
Para el estudio actual, los científicos tomaron imágenes por resonancia magnética de la estructura cerebral de 16 voluntarios dos semanas antes y después de realizar uncursodemeditacióndeochosemanas, un programa para reducir el estrés coordinado por la Universidad de Massachusetts. Además de las reuniones semanales, que incluían la práctica de lameditaciónconsciente, que se centra en la conciencia sin prejuicios de sensaciones y sentimientos, los voluntarios recibieron unas grabaciones de audio para seguir con sus prácticas en casa.
Los participantes en el grupo de meditación pasaron 27 minutos cada día practicando estos ejercicios. Sus respuestas a un cuestionario médico señalaban mejoras significativas en comparación con las respuestas antes del curso. El análisis de las imágenes por resonancia magnética encontró un incremento de la densidad de materia gris en el hipocampo, una zona del cerebro importante para el aprendizaje y la memoria, y en estructuras asociadas a la auto conciencia, la compasión y la introspección. Además, se descubrió una disminución de la materia gris en la amígdala cerebral, un conjunto de núcleos de neuronas localizadas en la profundidad de los lóbulos temporales, lo que está relacionado con una disminución el estrés. Ninguno de estos cambios fueron observados en el grupo de control formado por otros voluntarios, lo que demuestra que no fueron resultado solo del paso del tiempo.
"Es fascinante ver la plasticidad del cerebro y cómo, mediante la práctica de la meditación, podemos jugar un papel activo en el cambio del cerebro y puede aumentar nuestro bienestar y calidad de vida",dice Britta Hölzel, autora principal del estudio.
El hallazgo abre las puertas a nuevas terapias para pacientes que sufren problemas graves de estrés, como los que soportan un agudo estrés post-traumático tras una mala experiencia.