Cuando la mente se dispersa, recrea expectativas que se convierten en una especie de obsesión en la que el futuro sirve para escapar de un presente que resulta insatisfactorio, no obstante lo que percibes como una promesa de mejora o salvación, solo es una parte intrínseca de tu estado mental actual, es decir que no existe una verdadera trascendencia o liberación, ya que esto es una mera ilusión mental proyectada por la misma disfunción…
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Cuando dejas de honrar el presente… lo único que existe y que es real, esto te impide conectar con la dimensión atemporal de tu núcleo esencial…Tú eres consciencia de vida… y la vida es ahora… esta tiene la virtud y el poder de expresarse donde quiera que estés… cualquier otra consideración es puramente mental, no importa el traje que le pongas, o que tanto la trates de justificar.
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Acaba con la ilusiones del nuevo mundo, otras dimensiones, la nueva era, el paraíso, o el más allá…Tú vida es una promesa, vívela ahora…
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© Ari Shemoth
