En el cuello del octavo chacra – dentro de cada flor apuntando abajo a la corona desde arriba y apuntando arriba a los pies desde abajo – hay un pequeño filtro dorado. Es decir encima del chacra corona, entre el chacra estrella del alma y el corona.
El filtro encima de la corona controla la cantidad de energía universal entrante – y su frecuencia – que el cuerpo puede manejar a cada momento dado.
El filtro dorado encima de la corona, además de alimentar la energía universal en vuestro sistema, así mismo, en el sentido inverso, libera el exceso de tensión del chacra coronario.
Es ese cono de luz que en muchas culturas, interpretaban como luz de los ángeles, dioses o santos.
En el Angulo contrario, nos encontramos con un nuevo filtro dorado debajo de los pies actúa como descarga de todo el exceso de presión que se desprende del cuerpo y así mismo determina la cantidad de energía de la Tierra entrante que el cuerpo puede manejar.
Ambos filtros trabajan en doble dirección, con un propósito en las diferentes direcciones, actuando como válvulas de escape de presión del sistema de siete chakras contenido en el circuito energético del octavo chacra.
Es decir regulan la energía que arraigamos y la que integramos del universo, o bien nos impregnan de energía vital desde el núcleo de Gaia, y la integran en nuestro campo electromagnético o aura-el sexto chacra, el tercer ojo, s el responsable no solo e abrir nuestra conciencia, sino que nos permite a través de una gran conexión de supervisión física con cada uno de los otros seis chakras.
A su vez la unión entre el sexto chacra y los dos conos dorados de luz, son un gran sensor que nos permite evaluar y comprender, donde tenemos bloqueos y lo que os queda por aprender.
En todo momento, las personas, debemos limpiar, dichos sensores (meditación, cristales respiración…etc.) Incluso las personas que están físicamente sanas han de limpiar el “equipaje etérico” – bolsas de carga 3D – emocional, mental y espiritual de sus auras.
Las lecciones que se atraen en su vida siguen repitiéndose porque ellos magnetizan aquel específico nivel vibratorio de “lección”.
El nivel de frecuencia de magnetismo, establecido según la salud vibratoria de los siete chakras internos. Hoy que tener en cuenta en todo momento que no hablamos de Karmas etc., sino de frecuencias de luz, que los seres elegimos antes de encarnar, y que son totalmente restablecidas o pueden ser calculadas en tanto tomamos conciencia de ellas.
Por ello en pleno proceso de ascensión o de tormenta solar, nuestro primer punto a drenar, es la zona de cuello alto y oídos, o nariz, porque estamos limpiando las memorias, que se hallan en las glándulas del 6 chacra, pituitaria y pineal, para que puedan abrirse a nuevas intensidades de energía llamadas dimensiones.
Es por ello que en especial esta tormenta solar del 26 de setiembre de 2014, están en plena expansión de este chacra, porque les regula la intensidad, de apertura, muy superior a días, meses o años anteriores.
Incluso provocando grandes dosis de fiebre, en función de la apertura del chacra, para integrar la energía entrante, a nivel de frecuencia de los otros chacras. Todo está bien, nadie está haciendo nada malo, al contrario, estamos limpiando, memorias tan ancestrales que ni las recordamos.
Feliz día Elsa