Aquel que se siente Víctima de las experiencias vividas y no salga de este papel, se estará cerrando las puertas y posibilidades para sanarse a sí mismo, convirtiéndose en prisioneros de su propio dolor y frustración. El Alma entrega toda la sabiduría de la Luz ante aquel Ser que desde su Humildad y su Amor, Reconoce y Acepta sus Responsabilidades; siendo impulsados a transformarse.
La Victimización surge de la incomprensión oculta por el Alma. Cada experiencia es una oportunidad que se tiene para Comprender y Crecer de ellas. En la memoria celular del Ser, vienen programas ocultos o experiencias ya vividas por el Alma que necesitan ser Sanadas y Transcendidas en esta vida. Las emociones no sanadas y ocultas en nuestro Ser, son el reflejo del universo a nuestro alrededor. Por vibración, atraemos lo que somos en nuestro interior. Y es por esto que llegan a nuestras vidas, personas o situaciones que en el momento no fuimos capaces de entender ni reconocer, porque no se tenía el conocimiento o la consciencia plena de nuestra existencia. Pero una vez que abrimos nuestro Corazón hacia esa Consciencia Universal, obtenemos el entendimiento y comprensión de que todo lo que nos sucede, y que las personas que llegan a nuestras vidas, simplemente han sido orquestadas con anticipación por nuestra Alma para ayudarla a Sanarse y Elevarse. De aquí la importancia de salir de ese papel de Víctima, dejar de pensar en que son las otras personas las responsables de nuestro dolor o frustración, o en otros casos, que es Dios el responsable de todas estas experiencias que nos causaron dolor.
Cuando se está realmente preparado para Aceptar, Escuchar y Ser,… El corazón pide Ver y el Alma llega para Mostrar la Verdad, aunque nos cause más dolor! Y queda de nuestra parte, empezar ese trabajo interior para iluminar cada Emoción, Sentimiento y Sombra que habita en nuestro Ser para Liberarnos y poder salir definitivamente del papel de Victimización,…renaciendo así, un Nuevo Ser!
Debemos convertirnos en nuestros propios Observadores, mirarnos con ojos crísticos, sin juzgarnos, con compasión, para poder entender la naturaleza de cada experiencia y poder así retomar nuestro camino hacia la Verdad, el Autoconocimiento, la Sabiduría y la Luz.
Bendiciones, Luz y Amor
Analicia Masiero (AK)
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