|
juventud (4)
Gracias a este libro y a los sencillos ejercicios que incluye usted también podrá transformar su vida, si cada día emplea pocos minutos en practicarlos. Conseguirá todo aquello que siempre anheló: mejorar su salud, perder peso, aumentar su energía, mejorar la memoria y, sobre todo, sentirse más joven. Usted experimentará personalmente el poder transformador del antiguo secreto de la fuente de la juventud.
Este libro pequeño y maravillosamente simple no es para todos. Únicamente debe leerlo quien acepte el descabellado concepto de que el envejecimiento puede revertirse. Debe leerlo sólo si se atreve a creer que existe verdaderamente la fuente de la juventud. Si usted se aferra testarudamente a la prevaleciente idea de que estas cosas son imposibles, la lectura de este libro le resultará una pérdida de tiempo. Si por el contrario, usted acepta que lo imposible está realmente al alcance de su mano, entonces será ampliamente recompensado.
El libro de Peter Kelder es la única fuente escrita de la preciada información que revela cinco antiguos ritos tibetanos que ostentan la clave para una juventud, salud y vitalidad duraderas. Durante miles de años, estos ritos, al parecer mágicos, fueron mantenidos en secreto en remotos monasterios del Himalaya. Los cinco ritos fueron puestos en conocimiento del mundo occidental gracias a la edición original del libro del señor Kelder, publicado hace 50 años. Desde esa fecha, el libro y su extraordinario caudal de información han sido en gran medida olvidados o perdidos. El objetivo de esta nueva edición revisada es llevar al público el mensaje del señor Kelder con la esperanza de que grandes cantidades de personas reciban su ayuda e influencia.
Es imposible decir si la historia del señor Kelder sobre el coronel Bradford está basada en hechos reales, es ficción o una mezcla de ambas cosas, pero la validez del mensaje está fuera de duda. La propia experiencia del Autor y las cartas y notas enviadas por los lectores de todo el mundo demuestran, plena satisfacción, que los cinco ritos si funcionan. No se puede prometerles que los ritos borraran 50 años de sus edades, los transformarán de la noche a la mañana o los harán vivir 125 años.
Pero lo que sí sé sabe, es que pueden ayudar a cualquiera a parecer y sentirse más joven y a lograr una mayor sensación de bienestar. Si usted realiza los ritos diariamente, podrá comenzar a notar los resultados a los treinta días o antes. A las diez semanas aproximadamente, es probable, que comience a ver beneficios más sustanciales. Sea cual sea el ritmo de su progreso, resulta siempre un momento emocionante cuando los amigos comienzan realmente a comentar que usted se ve más joven y saludable.
DESCARGA DIRECTA
elsecretotibetanodelaeternajuventud19981.pdf
.
Ejercicios de El secreto tibetano de la eterna juventud
https://www.youtube.com/watch?v=k9KAQlmQQiw
.
ELIXIR ANCESTRAL DE LA ETERNA JUVENTUD PPS
https://lareconexionmexico.ning.com/profiles/blogs/elixir-ancestral-de-la-eterna-juventud
.
PDF REJUVENECE TU CUERPO. ENVIADO POR MAGGIE
https://lareconexionmexico.ning.com/profiles/blog/list?q=+EL+SECRETO+DE+LA+JUVENTUD
.
ENVIADO POR ROBERTO
DESCARGAR Y REJUVENECER
Elixir de eterna juventud
Vieja fórmula de ancestral sabiduría Elixir de eterna juventud
.
Desde tiempo inmemorial, el ser humano ha soñado con alcanzar la eterna juventud, aunque a veces parece haber olvidado el significado mismo de ser joven.
.
La juventud nos sugiere generosidad y alegría, idealismo y desapego, valentía y optimismo, libertad en la que no pesa el pasado ni angustia el futuro.
.
Atrapados en el materialismo, los hombres olvidaron que las fuentes de Juvenalia se hallaban en nosotros mismos y que es desde la juventud interior desde donde se obra el prodigio de la juventud integral, que se expresa en todo nuestro ser.
.
“ El hombre no envejece cuando se le arrugan las células epiteliales, sino cuando se le arrugan los sueños y las esperanzas“, decía el profesor Livraga. Los viejos Maestros siempre nos enseñaron que la vida se modifica y transforma desde la actitud de nuestra mente, y que desde el estado de conciencia adecuado podemos obrar verdaderos prodigios en nosotros mismos.
.
Parte del secreto ha llegado a nuestros días a través de los viejos textos de sabiduría ancestral
.
Vencer las emociones que nos envejecen: evitar el resentimiento, la ira y el mal genio, que nacen de la frustración. Fortalecer el cuerpo con la acción, la moderación en el sueño, la comida y el sexo: ser fuerte y estar dispuesto para ayudar, no gimoteando constantemente nuestras necesidades. Hay una vieja fórmula para constituir el elixir de la Eterna Juventud. Sus ingredientes mezclados en la proporción adecuada obran el prodigio
,
Desplegar toda nuestra alegría: La jovialidad surge cuando no experimentamos un agobio existencial y aprendemos a apreciar la belleza del momento presente 9. Liberarse de los prejuicios y dogmatismos. Buscar naturalmente la verdad y aquello que nos hace felices más allá de la opinión de los demás 4.- Ser útil y sentirse útil.
.
Avivar la curiosidad y el afán por conocer. Amar el misterio. 7.- Espíritu de aventura y desprendimiento: sentirse un peregrino de aventura por la vida. Caminar como aprendiz y no como víctima 6.- Desarrollar una elasticidad que no acuse los temores: la vida no nos dará tirones si no nos aferramos demasiado a las cosas y las formas
.
Vencer al tiempo: Liberarse del pasado asumiendo las lecciones que encierra, pero mirando al futuro como promesa, pensando que todo tiempo futuro puede traer nuevas oportunidades Cultivar la amistad frente al separatismo y la soledad de hoy día. Valorar el contacto humano frente a la despersonalización. 10.- Sentir la responsabilidad ante los compromisos no como una pérdida de libertad sino como la mejor expresión de nuestra autenticidad.
.
Avivar los ideales que alimentan el alma: alimentar el alma inmortal con la belleza del arte, con la pasión por la justicia, con la aspiración a la sabiduría y con la bondad de la entrega al bien de la humanidad. 13.- Encender cada día el entusiasmo: tener un ideal, alimentarlo, avivarlo. No dejar jamás morir la capacidad de soñar.
-
Bañarse todos los días en un poco de sabiduría para el alma, a través de la música que verticalice las emociones, y la reflexión y la meditación que pongan en juego elevados pensamientos.
.
Y, finalmente, amar, amar con el corazón y la mente; amar una flor, un atardecer; amar una mirada, amar la sabiduría, amar al mundo … EL AMOR ES LA FORMULA DE REGENERACIÓN DE LA VIDA que necesita de la inteligencia para hacerse consciente y de la voluntad para realizarse.
.
En nosotros está la fuente de la eterna juventud, en nosotros está la sonrisa, está la fuerza, está la mente y el corazón, está el alma inmortal, está la vida toda para recrearse a cada paso … En nosotros está el secreto, pero hay que desearlo con toda el alma, para una vez conquistado, ponerlo a los pies de aquello que amamos
.
Autor: Miguel Angel Padilla
LOS 5 RITOS TIBETANOS:POTENTE SISTEMA DE ASANAS Y PRANAYAMAS: POSTURAS FÍSICAS Y EJERCICIOS DE RESPIRACIÓN
-
RITO NUMERO UNO
El Primer Rito es muy sencillo. Se realiza con el objetivo expreso de acelerar los vórtices o chakras. Los niños lo hacen constantemente cuando juegan.
Todo lo que tienes que hacer es pararte erguido con los brazos extendidos hacia los lados del cuerpo (en cruz), de forma que queden en posición horizontal respecto al suelo. Luego gira hasta sentirte ligeramente mareado. Debes girar de izquierda a derecha, en el mismo sentido que las agujas de un reloj.
Al principio, la mayoría de los adultos podrán girar sólo media docena de veces antes de sentirse muy mareados. Si consideras necesario sentarte o acostarte para recuperarte, hazlo.
Así que los primeros días, deja de hacerlo cuando te sientas ligeramente mareado. Con el tiempo, a medida que vayas practicando los cinco ritos, irás haciendo más y más giros sintiendo menos mareo.
También puedes hacer lo que hacen bailarines y patinadores artísticos para evitar el mareo: antes de empezar el primer giro, fija un punto exactamente frente a ti. Cuando empieces a hacer el primer giro, continúa con la vista fija en ese punto mientras te sea posible. Luego tendrás que perderlo de vista, para que la cabeza pueda girar con el resto del cuerpo. Haz girar la cabeza muy rápido y vuelve a enfocar el punto.
RITO NUMERO DOS
Tiéndete sobre el suelo boca arriba. Es mejor acostarse sobre una alfombra gruesa o sobre algún tipo de superficie acolchada.
Completamente estirado sobre tu espalda, extiendes los brazos a lo largo del cuerpo , poniendo sobre el suelo las palmas de la mano, con los dedos bien unidos.
Luego levantas la cabeza y aprietas la barbilla contra el pecho. Una vez hecho esto, levanta las piernas sin flexionar las rodilla hasta alcanzar la posición vertical.
Puedes dejar que las piernas se deslicen hacia la cabeza, pero no dejes que se te doblen las rodillas.
Entonces baja lentamente la cabeza y las piernas sin doblar las rodillas, hasta tocar el suelo. Deja que todos los músculos se te relajen, y luego repite el rito.
Con cada repetición se debe establecer un ritmo de respiración. Aspira profundamente mientras levantas las piernas y la cabeza. Expira todo el aire mientras las bajas. Cuando estés en posición de relajación, continua con este ritmo. Mientras más profundamente respires, mejor.
Si al principio no eres capaz de mantener las piernas estiradas, deja doblar las rodillas lo que necesites. Pero esfuérzate por intentar estirarlas
RITO NUMERO TRES
El Tercer rito debe practicarse inmediatamente después del segundo. También es muy sencillo
Todo lo que necesita hacer es ponerse de rodillas sobre el piso manteniendo el cuerpo erguido. Las manos deben ponerse sobre los músculos de los muslos.
Entonces inclinas la cabeza y el cuello hacia delante, apretando la barbilla contra el pecho.
Luego tiras de la cabeza y el cuello hacia atrás tanto como te sea posible, y al mismo tiempo te inclinas hacia atrás arqueando la columna, manteniendo las manos sobre los muslos. Después volverás a la posición original y comienzas el ejercicio nuevamente.
Debes establecer también un ritmo de respiración: aspirarás profundamente cuando arquees la columna y expirarás cuando regreses a la posición original. La respiración profunda es la más beneficiosa, así que toma todo el aire que te permitan tus pulmones.
RITO NUMERO CUATRO
La primera vez que se practique este rito puede parecer muy difícil, pero al cabo de unos días será tan fácil como el resto
Primero, siéntate sobre el suelo con las piernas estiradas hacia delante, con una separación entre los pies de 12 pulgadas aproximadamente. Con el torso erguido, coloca las palmas de las manos sobre el suelo de manera que queden al lado de tus glúteos. Aprieta la barbilla contra el pecho
Luego empuja con fuerza la cadera hacia el cielo y regresa tu cabeza un poco hacia atrás. Deseas que tu cuerpo desde las rodillas hasta la cabeza sea una línea recta. Sostén y regresa a la postura original.
RITO NUMERO CINCO
Coloca el cuerpo boca abajo y sostenlo con las palmas de las manos. Los dedos de los pies déjalos flexionados para hacer este ejercicio . Tanto las manos como los pies los debes colocar a cierta distancia entre sí. Los brazos y las piernas los mantendrás rectos.
Comienza con los brazos perpendiculares al suelo y la columna arqueada de forma que el cuerpo quede flexionado. Tira de la cabeza hacia atrás lo más posible. Después flexionas el cuerpo a la altura de las caderas y lo colocas en forma de V invertida.
Al mismo tiempo, echa la barbilla hacia delante oprimiéndola contra el pecho.
Después vuelve a la posición original y repite el ejercicio.
A finales de la primera semana, generalmente las personas consideran este rito uno de los más fáciles de hacer. Cuando lo dominas, dejas caer el cuerpo desde la posición alta hasta un punto muy próximo al suelo, sin llegar a tocarlo. Tensa los músculos un momento, tanto en la posición alta como en la baja.
Sigue aplicando el mismo patrón de respiración. Aspira profundamente cuando levantes el cuerpo y exhala totalmente mientras lo bajas
¿Cuantas veces se tienen que repetir los ejercicios?
La primera semana deben repetirse tres veces .
Durante cada semana que siga, aumenta en dos las repeticiones, hasta que llegues a hacerlas 21 veces.
O sea:
1ª semana: 3 veces cada rito
2ª semana: 5 veces cada rito
3ª semana: 7 veces cada rito
En la 10ª semana los harás 21 veces
Si el primer rito (giros) te cuesta mucho hacerlo y lo haces menos que los demás, no te preocupes: Hazlo tantas veces como te sea posible sin sentirte muy mareado.
Al final podrás hacerlo las 21 veces.
¿A qué hora del día se deben hacer estos ejercicios ?
Cualquier hora es buena para hacerlos. Y hay quien los hace dos veces al día: por la mañana y por la noche. Pero no es necesario. Los puedes hacer a la hora que mejor te venga.