El Sueño con Dios

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EL SUEÑO CON DIOS.

(Noche del Domingo 6 y madrugada del Lunes 7 de mayo 2007.

 

 

Inició en algún lejano lugar de mi mente.  Estábamos varias personas vestidas con ropas de tiempos muy remotos arrodillados ante un Niño, el cual irradiaba una brillante luz.

 

Después de estarlo adorando por no sé cuanto tiempo todos nos levantamos y nos dirigimos en apresurada carrera hacia lugares distantes, a hacer algo que se nos había encomendado, pero que no tengo ahora ni la mas remota idea de que fue.

 

Después de mucho recorrer lugares y sitios distantes llegamos hasta donde había un caudaloso río en el que, sin saber por qué, todos estábamos ansiosos de zambullirnos en sus aguas.  El río tenía un tramo de mansas y cristalinas aguas pero después de un recodo se transformaban en turbulentas y furiosas aguas. Alguien nos advirtió que no nos acercáramos a donde se encontraban las agitadas y turbulentas aguas. . . algunos desoyeron la advertencia y fueron arrastrados por las aguas.

 

De pronto un profundo cansancio nos produjo un sueño que nos hizo dormir. . . Al despertar estábamos en una amplia cabaña en donde todo era oscuridad total. . . Al despertar me sobresaltó la oscuridad que me envolvía y pude percibir una débil luz que se filtraba por una rendija de una ventana que se encontraba en el extremo izquierdo de la cabaña. Apresuradamente me dirigí hacía la ventana y levanté una especie de cortina que la cubría. Detrás de la ventana, afuera de la cabaña, había una radiante luz que inmediatamente penetró a la cabaña iluminándola.  Los demás que se encontraban en la cabaña empezaron a despertar cuando sintieron la luz y se hizo un gran bullicio.

 

De pronto sentí una presencia divina en el extremo contrario de la cabaña.   Al voltear hacia allá pude percibir dos figuras que de alguna manera me eran muy familiares.  La primera de ellas era solo una silueta rodeada por la oscuridad. Era una figura masculina alta y delgada que sostenía entre sus manos a aquel mismo Niño que habíamos adorado cuando inició el sueño.  Sin embargo ahora el Niño tenía en su angelical e infantil rostro una delgada barba y me miraba con una dulzura y amor inmensos.

 

Inmediatamente me dirigí hacia donde el Niño y me postré ante él, al igual que las demás personas que se encontraban en la cabaña.  Con un gran amor en mi pecho le dije, sin pronunciar ninguna palabra, “YA TENIA MUCHAS GANAS DE VERTE”, y el Niño me contestó, también sin pronunciar ninguna palabra, “TAMBIÉN YO YA TENIA MUCHAS GANAS DE VERTE”.

 

No sé cuánto tiempo pasé contemplando el rostro del Niño y sintiéndome totalmente inundado de un gran amor y una paz profunda. De pronto otra figura masculina que se encontraba junto al Niño y que hasta ese momento me había sido imperceptible se dirigió hacia mí y me entregó varios cuadernillos de unos 10 cm  x 8 cm con cubierta de piel oscura y viejas hojas de filos dorados.  Abrí uno de los cuadernillos y me vi que tenía extraños signos y símbolos que no pude interpretar.  Seguí abriendo uno por uno los demás cuadernillos que se me habían entregado e igualmente no puede descifrar su contenido.  Entonces, la figura masculina que se encontraba junto al Niño dijo: “TODAVÍA NO ESTA LISTO”, y el Niño me miró de nuevo, esta vez con algo de tristeza en su mirada.

 

Súbitamente me vi en medio de la cabaña junto con los demás que estaban conmigo y estábamos saltando hacia el techo de la cabaña, el cual era demasiado alto. Aparentemente el objetivo era, no sé a ciencia cierta si alcanzar el techo o salir de la cabaña, pero lo que sí sé es que cualquiera que fuera el objetivo, esto era precisamente lo que el Niño deseaba que hiciera.

 

Después de muchos brincos intentando elevarme hasta el techo, de pronto recordé que en sueños pasados había aprendido a volar y entonces cerré los ojos y sentí una seguridad interior de que podría elevarme para lograr lo que el Niño quería que hiciera. . . Lo último que recuerdo de este sueño es haber cerrado mis ojos y haberme lanzado hacia arriba y sentir como me elevaba hacia el infinito.

 

 No sé por qué pero el día siguiente al sueño y varios días después, cuando recordaba el sueño me daba mucho sentimiento y ganas de llorar al recordar el pasaje en donde sin pronunciar ninguna palabra me dirigí hacia el niño para decirle, “YA TENIA MUCHAS GANAS DE VERTE”, y el Niño me contestó, también sin pronunciar ninguna palabra, “TAMBIÉN YO YA TENIA MUCHAS GANAS DE VERTE”. . . Sentía que se me oprimía el pecho y las lágrimas brotan de mis ojos sin que pueda impedirlo y después sentía una inmensa tristeza en mi corazón.

 

Estoy seguro de haber soñado con la presencia de Dios y que de alguna manera estuve a punto de partir junto a él en mi sueño, pero eso no fue posible porque “TODAVÍA NO ESTOY LISTO”,  y creo que el sentimiento que me oprimió el corazón y las lágrimas que brotaron de mis ojos cuando recordé esta parte del sueño se deben a que muy dentro mío siento una gran nostalgia por haber estado ante la presencia de DIOS y no saber con certeza qué es lo que espera de Mí y cuándo será que él decidirá que ya estoy listo para regresar a él. . . Además no puede dejar de entristecerme pensar que CUANDO ESTE LISTO para trascender hacia la presencia de Dios no volveré a estar con, ni a ver a los seres que más amo en esta vida: MI ESPOSA Y NUESTROS HIJOS, que son ellos las presencias mediante las cuales amándolas a ellas hago llegar mi amor a la presencia de DIOS.

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Todavía muchos días después de haber tenido el sueño me esforzaba por estar realizando cualquier actividad tratando de alejar el recuerdo del sueño para evitar entristecerme y llorar, sin embargo la imagen del Niño quedó tan impregnada en mi mente que difícilmente la pude apartar de mi memoria.

 

Según el ser que estaba junto al niño en el sueño, ¡TODAVÍA NO ESTOY LISTO! para poder leer los escritos que me presentaron en el sueño. . . Pero, ¿Qué contienen esos escritos que necesito poder leer PARA ESTAR LISTO?

 

Años después de ese sueño y siguiendo una casi inaudible pero insistente voz interior inicié desde mediados del 2009 el estudio del REIKI en el que, curiosamente, se utilizan símbolos. . . ¿Serán estos símbolos del REIKI los que contenían los escritos que se me presentaron en mi SUEÑO CON DIOS y que no supe leer?. . . Una vez que llegue a conocer a fondo los símbolos del REIKI y los sepa interpretar y utilizar correctamente ¿YA VOY A ESTAR LISTO? . . . LISTO ¿para qué?; ¿Para dejar mi actual cuerpo humano y trascender hacia la presencia de DIOS?. . . Sea cual fuere el destino que me espera, éste ha estado asechándome desde el principio de los tiempos, llevándome sin prisa hacia los caminos que he de tomar para cumplirlo, pero respetando en todo momento mi libre albedrío, esperando que por iniciativa propia atienda mi llamado interior y complete el aprendizaje PARA ESTAR LISTO.

 

 

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