Como es dentro, es afuera.
El mundo interior refleja el exterior.
Lo que está dentro se manifestará afuera.
Lo que eres en tu interior atraerás en el exterior.
Tú vives literalmente en el mundo que refleja tu propio mundo interno.
Cuando eres pacífico y estás contento en tu interior, cuando brillas de Amor por tí mismo y por otros y amas lo que estás haciendo y haces lo que te encanta, cuando te apoyas a tí mismo desde profundo en tu interior cultivando la belleza del Ser y el Espíritu, entonces tu mundo exterior se manifestará como paz, contento, amor, apoyo y belleza.
Cuando estás enojado en tu interior, aunque hayas enterrado el enojo tan profundo que no estés consciente de él, o ya no estés más consciente de él, atraerás a personas enojadas a tu vida que te reflejan el enojo que has negado dentro de tí.
Si sientes un profundo sentimiento de abandono que pudiera haber sucedido en otra vida y otro tiempo de vida, la gente te lo reflejará. Tal vez te dejen, o se retiren emocionalmente de tí, o inclusive tal vez mueran.
Si te estás mortificando constantemente con tus pensamientos sobre tí, atraerás a gente a tu vida que te lo van a reflejar.
Si crees que la Tierra está llena de gente mala y que todos están conspirando contra tí – entonces eso es lo que vas a atraer.
Si crees que eres pobre y que no te mereces la prosperidad, entonces rechazarás toda abundancia y el flujo de dinero que viene en tu vida.
Si te sientes seguro, te amas profundamente, honras tus propios espacios sagrados y estás contento y feliz en tu interior, atraerás a gente a tu vida que te mostrará eso. Tu integridad interna será reflejada por quienes están a tu alrededor.
Cuando haces el trabajo interno, empiezas a profundizar en tu interior y a liberar todo ese dolor emocional que estaba dentro de tí, elevas tanto tu propia frecuencia y tus vibraciones que atraes literalmente un estado de Ser más elevado en el mundo exterior, y empiezas a atraer a Seres afines que están en la misma banda frecuencial que tú.
El Universo siempre te reflejará cómo eres en tu INTERIOR. Como es dentro – es afuera.
Esta ley aplica también a tu cuerpo físico. Los sentimientos interiores son reflejados en la forma como construimos nuestros cuerpos.
Si nos sentimos emocional o sexualmente vulnerables en nuestro interior, pudiéramos construir una capa protectora de grasa sobre nuestro abdomen o caderas, los lugares donde sostenemos nuestras emociones y sexualidad.
Los hombres “machos” con musculosos pechos esconden con frecuencia sentimientos de vulnerabilidad, etc. Tu cuerpo es un espejo de tus sentimientos profundos y frecuentemente inconscientes.
Si tienes un dolor en cualquier parte de tu cuerpo, por ejemplo dolor de cuello, pregúntate a tí mismo: “¿a quién estoy desquiciando?” Es sabio que en vez de tomar medicamentos contra el dolor preguntes a tu cuerpo lo que te está tratando de decir.
¿Con qué o con quién no has hecho paz todavía? ¿qué no puedes tragar o digerir? ¿quién te está causando un dolor de cabeza? ¿cuál sentimiento de enojo o reprimido te está obstruyendo las arterias o endureciendo tus células?” Dolor en el pecho: “a quién estás permitiendo que te hiera?” Articulaciones rígidas: “¿cómo puedes cambiar tu actitud para marchar adelante?”
La vida en la asombrosa escuela de la Tierra nos da constantes oportunidades para aprender sobre nosotros mismos. Tus animales te van a reflejar tus cualidades interiores. ¿Cómo son tus animales? ¿cuáles cualidades tienen?
Cuando decimos bromeando que alguien es como su perro, poca cuenta nos damos de cuán verdad es eso. Una persona que aparenta ser muy agradable y calmada y que sin embargo tiene a un animal que es agresivo y molesto no está expresando sus sentimientos de enojo subyacentes.
La Ley es muy simple y exacta.
Los Seres Más Elevados a cuyo cargo están ustedes hacen que los objetos materiales en su vida se alteren conforme a su propio estado interior. Las tuberías, tejados o radiadores que gotean en su vida exterior revelan emociones que gotean en su interior, mientras que los fuegos rugiendo afuera reflejan ardientes asuntos en su interior.
Tenemos que empezar a despejar nuestros yos internos por dentro y por fuera y hacer una mayor limpieza interna y trabajo de derrumbe a fin de manifestar cambios en nuestras vidas físicas.
Cuando comprendamos que esta ley se mueve armoniosamente con la primera ley, entonces entendemos que cuando hacemos la limpieza interna y trabajo de despeje, de liberación, entonces cambiamos el mundo exterior. NOSOTROS SOMOS LITERALMENTE EL CAMBIO QUE DESEAMOS VER EN EL MUNDO. Así de poderosos somos en realidad.
Cuando elevan su propia conciencia, elevan la conciencia de todo su mundo exterior, ese mundo que les es reflejado de regreso.
Cuando rechazan en su interior, ustedes rechazan en su exterior.
Si desean cambiar la sociedad u otros, entonces deben primero cambiarse a sí mismos.
El Universo se arregla a sí mismo según como ustedes crean.
En consecuencia, nos tenemos que vigilar constantemente y a nuestro propio mundo interior. Empiecen a bendecir el dolor en su vida porque el dolor está surgiendo profundo en esas partes en su interior que necesitan ser sanadas y ser íntegras. Empiecen a bendecir los retos en su vida porque les están mostrando dónde necesitan trabajar en sí mismos y dónde está su tendón de Aquiles para que puedan usar sus músculos internos y fortalecerlos.
Me tomó años captar apenas esta ley básica. Estaba pensando esta mañana acerca de haber crecido con padres que creen en la carencia. Así que creí en la carencia también y empecé a resentir el dinero. Fui educada creyendo que tan pronto fuera capaz, tendría que tener un trabajo y ganar dinero y sustentarme a mí misma, pero con la negativa programación que había asimilado odiaba ir a un banco. Mi relación con el dinero entonces era una de temor y de enojo.
Fue sólo cuando no tenía ni un sólo centavo a mi nombre ni ningún trabajo o apoyo cuando me dí cuenta de que tenía que hacer un importante trabajo de limpieza/ de despeje interior. Se me mostró que el dinero es energía, como cualquier otra cosa; no tiene carga ni positiva ni negativa. Eran mis propias emociones internas y la carga emocional que yo puse en esta energía lo que estaba creando exactamente lo que temía más en mi vida, y con esto también un gran sentimiento de abandono. Esto es de vidas pasadas.
Bueno, tenía literalmente que reprogramarme a mí misma y mis propias creencias internas. Se me pidió que bendijera mi bolso, mis cuentas bancarias, todo el dinero que fluye entrando y saliendo de mi vida, y que empezara a cobrar por mis servicios — por mi propia energía que invierto en esto y porque entonces lo cargo con una energía positiva. Empecé realmente a reconocer mi propio valor y a entender que mi propio mundo interior es reflejado en el exterior.
A medida que empecé a trabajar a través de mis sentimientos de abandono –primero tuve que regresar al tiempo de la vida en la que me sentí más abandonada y luego encontrar el lazo con esta vida, que en ese tiempo fue cuando era un bebé y mi madre estuvo en el hospital por unos meses y tuve que ser cuidada por mi padre, mi abuela y mis hermanos. Cuando regresé y me adentré a estas heridas y las abrí, liberando todo el pus que estaba dentro y estuve agradecida por lo que había pasado y ví cómo me había servido, entonces pude sanar.
Interesantemente, cuando cambié mi propia visión y creencias y sentimientos, lo exterior empezó a cambiar positivamente, y he avanzado años luz más allá de lo que era y experimentaba meramente hace tres años.
Si hubiera una entre las leyes cósmicas de la que todo el planeta y toda su gente tuvieran que lograr la maestría, sería ésta. Cuando cesamos de querer cambiar constantemente a todo el mundo y nos cambiamos a nosotros mismos — todo el mundo cambia. Tal es la Ley Cósmica.