¿Qué es Feng Shui?

 

¿Qué es Feng Shui?

 

 

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Para todos es sabido que el Feng Shui, nombre por el que se conoce este arte milenario Chino de crear ambientes armoniosos; ha influido a lo largo de la historia del país y la idiosincrasia de China. Todos los espacios tanto antiguos como modernos, están regidos por las normas y fundamentos de este arte. Así tenemos: la Ciudad Prohibida de Pekín, la Sede Central del Banco de China en Hong Kong, la Ciudad Olímpica de Pekín (construida para los Juegos Olímpicos de 2008), etc.,.. Actualmente no se construye ningún banco o edificio importante sin el asesoramiento de un experto en esta ciencia.

 

El Feng shui a través de la historia ha recibido diferentes nombres, el registro mas antiguo que se conoce en que se hace mención de la palabra Feng shui es el tratado de Guo Pu en el “libro de los entierros” que data del año 276 – 324

Su significado literal es:  Feng = viento   shui = agua   y se suele pronunciar fong shuei. Su nombre original, según registros históricos era Kan Yu, que significa literalmente “configuración del Cielo” (Kan) y “formación de la Tierra” (Yu), también conocido como Camino del Cielo y Camino de la Tierra.

 

En la tradición china, el Ser Humano, por su nacimiento tiene tres tipos de influencias que determinan su suerte “El Cielo, la Tierra y el Hombre” el “Cielo” que corresponde al Karma o Dharma que todos traemos al nacer y que su estudio es especialidad del Taoismo y la Astrología Tradicional China (BaZi), La “Tierra” corresponde a la influencia del entorno y el lugar donde vive o trabaja (Feng Shui) y el “Hombre” es la Suerte que uno mismo genera a través del estilo de vida que adopta y las decisiones que toma.

 

En su origen, el Feng Shui era una herramienta de uso exclusivo de las clases dirigentes: emperadores y gobernantes. Siempre fue considerado un asunto sagrado y secreto, sólo conocido y utilizado dentro del círculo imperial. Sus conocimientos pasaron de generación en generación, de padres a hijos; o de maestro a discípulo, por vía oral.

Estos Maestros o expertos en Feng Shui, eran consultados para localizar el mejor “lugar de enterramiento” o “Nido del Dragón” (disposición de la morfología del terreno con unas características concretas); del cuál, iba a depender el futuro de toda una Dinastía: su permanencia y continuidad en el trono, sus éxitos militares, su suerte, salud de todos sus miembros, etc.,…

Mas adelante el Feng Shui puso énfasis en las “casas de los vivos”: Palacios de los Emperadores (Ciudad Prohibida de Pekín), casa de los Políticos, cómo mover el frente en las guerras,…
Pero, con el devenir del tiempo, se fue extendiendo este conocimiento; dejó de ser de uso exclusivo de la clase dirigente, y se fue popularizando. Sus principios, conceptos, y leyes matemáticas, empezaron a aplicarse al hombre en relación al entorno que le rodea: jardines, casas, lugares de trabajo,…; y se amplió a toda la población;  aunque los grandes Maestros seguían perteneciendo a un grupo reducido de personas con una formación, que iba desde la Medicina Tradicional China, el Chi Kun o Tai Chi; hasta conocimientos de alimentación, la lectura de rostros, el manejo del oráculo Chino (I Ching) y la Astrología Tradicional entre otros.

 

Algunos que no comprende la cultura china o están poco familiarizado con su filosofía suele asociar al Feng shui con algo mágico, místico o adivinatorio, nada esta mas lejos que este absurdo concepto.

 

El Feng shui busca armonizar al hombre con la naturaleza y procurar ambientes más saludables y armónicos donde vivir o trabajar a fin de que éste pueda desarrollarse armónicamente hacia un crecimiento mayor. Sus diagnósticos y soluciones son capaces de resolver problemas de salud persistentes, conflictos en el trabajo, discrepancias padres/hijos, pérdidas económicas,…; y en general, todos los conflictos que envuelven a las personas que habitan bajo un mismo techo.

 

Feng shui suele ser confundido regularmente con un tipo de decoración oriental o arte chino de ornamentar una vivienda, tampoco tiene nada que ver con ello, el Feng shui obedece a principios naturales y de sentido común y nada tiene que ver con la forma de decorar una casa aunque la decoración es parte del Feng shui.

 

Se puede aplicar Feng shui en cualquier parte del mundo sin importar su cultura, lengua o costumbre y nunca nadie lo sabrá jamás que se hizo feng shui en un lugar porque no hay nada característico, disfraz, adorno o distintivo que se coloque o sea necesario para armonizar una vivienda.

 

Hay personas que piensan que Feng shui es una decoración china, o que todo lo que viene de este país tiene una relación o puede usarse para hacer Feng shui en un lugar, campanitas, carillones, estatuas de dioses chinos, banderines, monedas, sobre rojos, bambú etc. nada tiene que ver con el Feng shui.

 

El arte y ciencia del Feng shui estudia el entorno que nos rodea, el diseño de la vivienda, su distribución interior, se fija si hay ríos, montañas, llanuras, árboles, otras edificaciones, calles, relieves etc. la forma y la geografía del lugar indican al experto el tipo de energía que se encuentra en ese lugar y la forma de la vivienda puede indicar que suerte tendrán los que vivan en ella.

 

Su uso y aplicación ha sido muy variado y se han tejido leyendas a su alrededor que a través de los siglos ha venido siendo contaminado con apreciaciones populares y culturales, recordemos que el pueblo chino es muy supersticioso y creyente, para ellos el mundo y la naturaleza que le rodea es un acto mágico o divino pero no lo ven como nosotros los occidentales, cuando hablamos de divinidad nos referimos a un ser único,

El concepto chino de divino se refiere a un panteón de dioses, rituales y creencias que le dan sentido a sus vida y les abre una esperanza a un futuro o mañana mejor, por ello existen distintos niveles de información, uno que es popular y es parte de la cultura china, el religioso o de supersticiones y el filosófico que es materia de los erudito y grandes maestros de la antigüedad, ellos eran los únicos que conocían y comprendían esta ciencia y disciplina y cuidaron mucho de que así se mantuviera por muchos siglos, de modo que la enseñanza del Feng shui se transmitía oralmente de maestro a discípulo y eran muy celosos con su conocimiento, muchos maestro llegaron a morir sin dejar herederos y una gran parte de este ancestral y maravilloso conocimiento se ha perdido, sin embargo, la  mayor parte se ha preservado gracias a esta celosa tradición y los clásicos que se han encontrado (textos antiguos) nos han servido de gran ayuda sin embargo, no todo esta en los libros y aun hoy la enseñanza verdadera se sigue transmitiendo oralmente y con la guía y supervisión de un maestro o experto calificado.

 

Su origen se pierde en los tiempos, comienzan las primeras observaciones de la naturaleza, se va estructurando un modelo del universo y va surgiendo la cosmogonía china, con el tiempo el conocimiento se va estructurando, tomando nueva formas y rumbos, van surgiendo especialidades a si va naciendo el taoísmo, la acupuntura, el Chi kung, la herbolaria china, el Feng shui, etc. muchos tratados se fueron escribiendo pero ninguno como el I Ching que guarda y recopila una gran parte de los antiguos hallazgos formando una fuente de inapreciable valor de los patrones universales y los principios básicos que rigen el mundo natural, de allí nacen muchas ciencias y disciplinas entre ellas el feng shui que aunque guarda simientes comunes con otras ciencias cada una sigue su propio camino y campo de acción.

 

El libro de los cambios o mutaciones (I Ching) nos habla del concepto del yin y yang como un modo de hacer referencia a dos fuerzas y principios fundamentales que subyace oculto en todo lo que existe, da forma, continuidad, manifiesta y cambia, evoluciona, se activa y descansa y nada de lo que existe puede permanecer sin esta actuación que conceptualmente llamamos yin y yang, cuando algo de lo que existe sale de su equilibrio se altera y sobreviene un caos, si el equilibrio no se restablece da origen a nuevos cambios mas radicales y profundo, que dentro del concepto humanos establecemos como calamidades o desastres pero para la naturaleza nada es bueno y malo y todo lo que ocurre es correcto y necesario, solo debemos elevar nuestra óptica y ver el panorama completo en vez de centrarnos en los detalles.

 

Así comprendemos mejor el Feng shui como una forma de armonizar los opuesto a fin de que se vuelvan complementarios, cuando surge el desequilibrio surgen los problemas, enfermedades, y situaciones conflictivas, al recuperarse el equilibrio reina la armonía y el crecimiento

 

Hay reglas de medición o patrones de comprensión para medir el feng shui de un lugar y siempre se aplicaran las técnicas o escuelas que sean mas apropiadas para cada caso, el primer factor que se debe estudiar es la energía o Chi y ver como este afecta a las personas, la luz, el aire, la ventilación, el agua, la sombra, lo que crece a su alrededor van influyendo de distinta manera según la época, la estación, el año, si es de día o de noche. Esta energía puede encontrarse fuera de la vivienda y si no entra habrá problemas y si es muy fuerte o débil afectara a sus residente una vez que la penetre además hay que asegurar que si es buen Chi este llegue hasta el último rincón de la casa y no se bloquee en el camino o se altere su configuración o equilibrio entre las fuerzas del yin y el yang

 

El Feng Shui con ayuda de la Astrología Tradicional permite además, seleccionar fechas propicia para acontecimientos importantes (firma de contratos, compraventa, inauguración de negocio, mudanza, apertura de un negocio o local comercial, celebración de una boda,…), en la construcción es imperativo seleccionar una fecha auspiciosa para el inicio de una obra y traslado a una nueva vivienda, medir la  compatibilidad sujeto-vivienda,….

 

 

A esto podemos añadir un comentario de Jesús Camacho Alumno del Maester Wen Ming Wang.

 

          Se puede experimentar el Feng Shui a través de nuestros sentidos. Si enfrente de nosotros hay aristas o tejados de otras casas apuntando hacia nuestra vivienda, significa "fuego" en el Feng Shui, lo percibimos a través de los ojos, provoca que los que viven allí se muestren irascibles con más facilidad. Lo mismo pasa con el ruido de motores como el de las lavadoras al lado de una habitación, o generadores de electricidad en el centro de la casa. Si enfrente del edificio donde se vive o trabaja hay un camino o carretera con tráfico en dirección a éste, la corriente de aire dará la sensación de tener una flecha apuntando directamente hacía nosotros acentuando así la inestabilidad.

         

          No obstante, también existen cosas fáciles que todo el mundo puede hacer. La aplicación más simple del Feng Shui es empezar por e medio ambiente. Si tenemos la casa recogida, ordenada, limpia, llena de aire fresco y cuya construcción respete la naturaleza, ya tendremos lo básico para un buen Feng Shui. (Leer Casas con Alma, Paredes con Memoria, por Carlos Sosa, de Júpiter Editores)

 

          El Feng Shui no solo existe en el entorno que nos rodea, en donde vivimos, sino también existe en nosotros. Feng (viento) es nuestro pensamiento y Shui (agua) es nuestro comportamiento. Lo mismo pasa con una vivienda. La puerta y los pasillos son vías (Shui) y el aire que corre entre ellos es (Feng). Si una vivienda no tuviese puertas, no correría el aire, no se podría vivir. Para mantener la vida de una casa, se necesita el Feng Shui para obtener un pleno equilibrio con la naturaleza.

 

 

Carlos Sosa
Feng Shui y Astrología Tradicional
Cursos presenciales y a distancia

 

Twitter - @TuFengShui
Blog -
http://fengshuitradicional.blogia.com/  

 

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