Vengo de una linda dimensión, Padre-Madre Dios me envió para brindar amor y hacer más cálido el cariño entre los seres.
Nací feliz, jugaba con mis hermanitos; mamá nos brindaba ternura y alimento; tomábamos una deliciosa leche tibia de sus pechos. Pero miraba a mi madre muy lastimada, golpeada por seres grandes y fuertes; ella decía que eran los humanos.
Yo me sentía algo triste de ver el dolor de mamá, pero aun en ese basurero donde vivía era mi bello hogar.
Un día llegó alguien muy malvado y nos arrebató de nuestra madre; ella no pudo hacer nada, con triste mirada nos decía:- los amo, perdónenme.
Yo lloraba mucho; luego nos llevaron a un lugar oscuro, y nos metieron a una jaula. Temblábamos de miedo; parecía que estábamos en una plaza de mercado.
Vendieron a mis hermanitos, pero yo como era muy delgada y débil, no me compró nadie. La persona malvada me maltrataba, todo mi cuerpo yacía de dolor. Después me tiró a la calle, sentí mucho temor y empecé a caminar tiempo tras tiempo. Las noches la pasaba triste y sola.
La lluvia mojaba mi cuerpo, sentía mucho frío. Algunas personas tiraban alimento, yo lo comía; así sobrevivía.
Un día llegué por coincidencia al basurero donde estaba mamá, la busque por todo lado; cuando la vi corrí a halagarla, pero miré su cuerpo muy quieto; lamia y lamia, ella no despertaba. Observé su cuello, había sangre, estaba degollada; creo que fue acción de los humanos.
Lloré mucho y mi corazón no aguantaba el dolor. Estuve dos días al lado de mi progenitora pero nunca despertó. La lamí con dulce amor y me fui a seguir el camino de dolor.
Mi sufrimiento fue bastante, hasta que un día dije:-Dios no puedo seguir más, estoy muy golpeada y hambrienta; llévame papá Dios quiero ir a mí dimensión de amor; en esta tierra los humanos se olvidaron de amar incondicionalmente.
En ese instante hubo una gran tempestad, salí corriendo a refugiarme a las gradas de un parque y dormí profundamente.
Al otro día me llevaba entre sus brazos un hombre, luego dijo:- tranquila yo te amo estarás bien linda.
Sentí el bello corazón de ese hombre, parecía como el cariño de mi madre.
Llegué a un hermoso hogar de seres afectuosos; comí delicioso, luego me bañaron con delicadeza, me dieron vitaminas y sobre todo ternura.
En las tardes salimos a la pradera a correr juntos, parecemos dulces niños llenos de amor y pureza.
Yo soy parte de su familia y vivo feliz. Me di cuenta que hay humanos buenos, llenos de compasión.
Le digo al Creador :- gracias mi Dios porque soy amada.
Un consejo les doy, amen a todo Ser viviente, no maltraten a nadie, ya que somos parte de la creación divina universal. Brinden bastante amor y luz, verán que lindo planeta hay.
¡Ah!, me bautizaron con el nombre de Alegría, los amo.
FIN
YIDER ELDER ARAQUE CERÓN
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