Dulce corazón, de noble y bella intensión
Donde la paz florece, el amor crece
Ingenuidad latente, el ángel presente
Como niño jugando, a la Fuente llegando.
Gracia evidente, humildad en su ente
Riqueza de alegría, maravillosa melodía
Alquimista real, siempre leal
A la naturaleza unido, por el universo ungido.
Ojos cristalinos, puros y finos
Mago interior, cantico y loor
Lleva la compasión, con gran bendición
Aurora reluciente, vive el presente.
Meditación a flor de piel, amigo fiel
La oración, se conjuga en respiración
Amador de los animales, conexión con los elementales
Gracias Dios por el dulce corazón, de la sabia razón.
Bendiciones,
Yider Elder Araque Cerón
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