EL SALMO 23
El Salmo 23 es uno de los poemas más queridos en toda la literatura. Se recita en el lenguaje de un pastor, pero actualmente se traduce con facilidad al lenguaje de nuestras experiencias y necesidades. Para aquel que se confronta con un reto de salud o de pobreza, este Salmo puede tener estos significados inspirados por fe.
CURACIÓN
El Señor es mi salud, no puedo enfermar
El me hace soltar toda tensión.
Me conduce por sendas de paz, en la mente y en el corazón.
El restaura mi deleite por la vida.
El me guía a usar mi cuerpo sabiamente, por amor de su nombre.
Si, aunque esté rodeado de enfermedades o del pensamiento de enfermedad, no he de temer nada, porque Tú estás conmigo… Tu verdad y tú vida me sostienen.
Tú preparas una reserva dentro de mí para afrontar todos los retos de la vida, llenas mi corazón de vida sanadora, mi energía está sin ataduras.
Ciertamente la salud y la alegría me seguirán todos los días de mi vida, y en la conciencia de pureza moraré para siempre.
Amén, amén, amén.
PROSPERIDAD
El Señor es mi banquero, mi crédito es bueno.
El me hace descansar en el convencimiento de la abundancia omnipresente.
El me da la llave de su caja de seguridad.
El restaura mi fe en sus riquezas.
El me guía por senderos de prosperidad, por amor de su nombre.
Si, aunque ande en la propia sombra de las deudas, no temo mal alguno, porque Tú estás conmigo.
Tu plata y tu oro son mi seguridad.
Tú me abres el camino en la presencia del cobrador.
Tú llenas mi cartera con abundancia, mi medida rebosa.
Ciertamente el Bien y la Prosperidad me acompañan todos los días de mi vida y haré negocios en el nombre del Señor para siempre.
Amén, amén, amén.
Adaptaciones del REVERENDO LUIS MOLINARY
Comentarios
Muchas gracias, querida Nelly. Un abrazo
Me encantó tu hijito de 4 patas. Así les digo a mis niños chihuahua. Mis hijitos.