EL DESPERTAR DE LA CONSCIENCIA - Joaquín Carrizosa Gutiérrez

5890797871?profile=originalEL DESPERTAR DE LA CONSCIENCIA Y LA INTELIGENCIA EMOCIONAL - JOAQUÍN CARRIZOSA GUTIÉRREZ (Fragmentos)

El miedo a volvernos locos y el miedo a parecerlo van de la mano.

Ese miedo, junto con el miedo a ser rechazados por los demás, es el que más se aproxima al miedo por excelencia: el miedo a morir, que en realidad acapara todos los miedos.
Ser raro ya es motivo de rechazo para la gente en general, cuanto ni más si esa “rareza” se refiere a nuestra mente.
Ese sentimiento de aversión y rechazo no es otra cosa que el reflejo de su propio temor, del propio miedo que las personas tienen a la locura, a perder el control y cometer un acto repudiado y castigado por los demás e incluso por ellos mismos, no es otra cosa que el miedo a perder lo que son, lo que creen que son, que es en realidad lo que mantiene el miedo a morir. Pues, una vez que trascendemos nuestras identidades, nuestro ego, ese miedo desaparece, y tras él los demás.
Vamos tirando de ese modo, sobreviviendo a pesar de obviar ese lado nuestro, esa cara oculta, que, como la de la luna, sabemos que está ahí aunque no podamos verla, muchas veces porque no nos atrevemos.
Obviar esa cara de nuestra realidad se traduce en vivir en la mentira, pues media verdad sigue siendo una mentira.
Y vivir en la mentira es muy sufrido, porque es a nosotros mismos a quien engañamos, y no podemos hacerlo del todo, pues vivimos al menos media verdad. Somos conscientes de una parte de la realidad, lo que, en contraste con la mentira, nos lleva a sufrir desengaños, frustraciones, ira...
Sobrevivimos porque somos producto de la evolución, y a ella no le importa si lo hacemos expresándonos con plenitud u hostigados por nuestras condiciones, por nuestras ansias y deseos. Le interesa la supervivencia.
De hecho no sabemos si hubiésemos sobrevivido sin esa condición de ignorancia, probablemente no, y de haberlo hecho seríamos otra especie distinta.
Pero lo cierto es que aquí estamos, con nuestros pros y contras, y al igual que tenemos eso que denominamos ego y está tan de moda, también tenemos eso que denominamos conciencia y que sirve, entre otras muchas cosas, para prescindir del ego.
Al igual que obviamos esa parte de nosotros y nos abandonamos a la ignorancia, tenemos el potencial de desvelar cuanto de ignoto haya para nosotros en nuestro ser, en nuestro mundo interior, de relevancia para nuestra realización, para la expresión de la naturaleza, amadora, de nuestro ser.
No es tarea fácil; en ningún momento quisiera dar esa imagen que tan frecuentemente se da en algunos libros de que con poco uno consigue iluminarse y ser muy feliz. Ni mucho menos. Pero sí que es muy posible conseguir estar mejor con uno mismo y con la vida en general trabajando en conocerse y moldearse.
Ocurre como con el deporte: No por practicar vamos a ser todos atletas y plusmarquistas, pero sí podemos estar un poco más en forma y saludables; y, si las condiciones son las adecuadas, cabe la posibilidad de llegar a lo más alto. Pero eso no es lo normal, e incluso puede que nos propiciemos lesiones y frustraciones si aspiramos a tanto.
El consejo en la práctica del autoconocimiento es, a priori, practicar para dejar de estar inútilmente limitados por absurdos miedos, lo cual ya es un mundo.
En la medida que vayamos consiguiéndolo, pasito a pasito, iremos quitándonos peso y sufrimiento y gozando de mayor libertad; y a medida que vayamos sufriendo menos y siendo conscientes de nuestros avances, seremos más felices.
No es poco, sobre todo si se tienen grandes limitaciones; lo cual no significa que, llegado el caso, dejemos de trabajar para continuar avanzando en este camino; al contrario.
Si lo conseguimos, si conseguimos liberarnos del lastre que supone estar limitados por grandes e inútiles miedos, estaremos muy motivados para seguir descubriéndonos, y si las condiciones son propicias nuestro avance puede ser extraordinario.
Pero para poder avanzar en este camino hay que ser humildes hasta para pedir, y valorar con gratitud, humildad y conocimiento cada logro, cada pequeño gran logro traducido en un poco más de libertad.
Eso nos hará fuertes y felices, al contrario que si exigimos sin fundamento y menospreciamos aquellos pequeños grandes logros que, con mucho esfuerzo y tesón, vamos consiguiendo. . .
Votos 0
Enviadme un correo electrónico cuando las personas hayan dejado sus comentarios –

¡Tienes que ser miembro de CONEXIONUNIVERSAL para agregar comentarios!

Join CONEXIONUNIVERSAL

Comentarios

  • Gracias por compartir. NAMASTÉ

This reply was deleted.