Por las leyes universales, el espíritu de una niña inocente, quedó atrapada en las dimensiones paranormales
Ella olvidó quien era, pero vivía alegre de buena manera
La pequeña podía mirar a los humanos, los amaba como hermanos
Pero a ella no la miraban, los niños sentían su presencia algo rara y se asustaban.
La fantasmita solo quería jugar, y con alguien hablar
Volaba por el bosque de hermosura, los animalitos la miraban y la saludaban con ternura
Les cantaba con inocencia, ellos aplaudían en complacencia
Pero ella un amigo deseaba tener, se entristecía por momentos porque no la podían ver.
De repente un pequeño gritaba; decía, ¡ayúdenme!, me pellizcan los niños traviesos son una manada
Ella voló apresurada, y su presencia asustó a todos los traviesillos; ellos corrían con una pánica mirada
El niño dijo, gracias fantasmita de buen corazón, yo te puedo ver porque es cristalina mi razón
La niña le dice, hola amiguito, feliz estoy que puedas ver, aunque los pequeñuelos mi frío intenso los hizo correr.
Yo estaré a tu lado y no te molestaran, ni más travesuras harán
Los dos formaron una bonita amistad, todo era cariño y buena voluntad
Ella le enseñaba a leer, también el mundo paranormal ver
Corrían juntos por la pradera, empezó para el niño la nueva era.
La madre del pequeño, a solas lo miraba conversando; ella decía, a esta edad con el amigo imaginario debe estar jugando
La fantasmita siempre dormía a su lado, lo quería como el Ser más bello y alado
Juntos reían de sus travesuras, meditaban y soñaban con los seres de luz y las armaduras
El niño crecía sin parar, y la pequeña con amor fraternal siempre lo iba a amar.
Él se estaba olvidando de jugar, ella se sentía un poco aislada y se ponía a llorar
El joven le decía, mira princesita, ya tengo 20 años y estoy en la universidad, no tengo tiempo para jugar, debes comprenderme mi bella deidad
Él miró en la pequeña su soledad, investigó por varios días de donde venía la fantasmita en verdad
Viajó a las afueras de la ciudad y miró una casa abandonada, se dio cuenta que la esencia de la pequeña de ahí emanaba.
La fantasmita al ver la casa empezó a llorar, y pudo su vida recordar
Le dijo, fui encerrada y olvidada, después de unos días en tristeza y agonía se apagó mi mirada
Mis huesitos todavía ahí están, dame santa sepultura, así puedo ascender a la bella altura
Fui huérfana y unos oscuros me encerraron y por siempre se olvidaron.
El joven limpia sus lágrimas e ingresa a la casa para realizar la misión, luego en el jardín la entierra y eleva un dulce oración
La pequeña se transforma en un bello ángel, y del cielo descienden dos arcángeles
Ella se despide con gratitud, le dice, gracias amigo del alma por tu amor e inocente virtud
Por fin descansé y parto a la gloría, donde estaré junto a Padre- Madre en victoria.
La luz del ángel abraza al joven con dulzura, luego los arcángeles se elevan con ella a la sublime altura
Él miraba todos los días una muñeca de trapo que en aquel lugar había encontrado, antes de la santa sepultura en su bolsillo la había guardado
Sabe que algún día estará con ella, aquí termina una historia paranormal bella
Gracias Dios por tus secretos infinitos, siempre a nuestro lado están los angelitos.
Bendiciones,
Yider Elder Araque Cerón
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